El Proyecto

Cuatro tizas es la apuesta por la eficiencia en la acción docente, eficiencia en la rentabilización de los esfuerzos aplicados por parte de los equipos docentes y las comunidades educativas en las diferentes actuaciones en la escuela, tanto a través de actividades curriculares como extracurriculares y complementarias.

La acción docente revierte, principalmente, en su alumnado, siendo éste el destinatario de las intervenciones. Sin embargo, la energía dispuesta para ello bien podría tener impactos que van más allá del propio centro, pudiendo beneficiar, además de a su alumnado, a otros alumnos y alumnas de otros centros, que, con una mínima planificación, pueden aprovechar todo este tremendo esfuerzo.

Esta pérdida de energía, o no aprovechada, es más evidente en los colegios pequeños, de una sola línea, por cuanto el número de alumnos de cada nivel es menor. Los centros grandes tienen mayor facilidad para alcanzar masas críticas que permitan el desarrollo de un gran número de actividades que dependen justamente del número total de usuarios en la actividad planteada, más cuando se trata de compartir gastos, o simplemente para analizar si los esfuerzos requeridos en tiempo y trabajo docente se ajustan a los resultados esperados, pereciéndonos éstos suficientes como para iniciar la acción.

Si compartimos que la unión da más fuerza a la acción y más oportunidades a nuestro alumnado, y que esta unidad debe asegurar en todo momento la autonomía de cada centro participante, entonces reconocemos el potencial que tienen este tipo de programas.

Como objetivos podemos considerar los siguientes:
-      Aprovechar la acción educativa de otros centros para una mayor rentabilidad de los esfuerzos programáticos.
-      Intercambiar experiencias educativas entre los centros participantes.
-      Compartir experiencias educativas con otros centros.

A la hora de intercambiar y compartir experiencias, planes, programas, proyectos, actividades para el mayor aprovechamiento, es necesario atender al siguiente principio: primero dar para después recibir.

Desde una perspectiva temporal de inicio de este programa, parece obvio que los centros participantes partan de un primer ofrecimiento, y al mismo tiempo, obtengan ya un beneficio.

¿Por qué unos centros y no otros? Este programa quiere contar, en principio, con la participación de los colegios Casablanca, Federico Muelas y Fray Luis de León. Y son estos centros porque:
-      Compartimos una singularidad, somos centros de una sola línea.
-      Compartimos recursos semejantes, tanto materiales como humanos.
-      Compartimos algunos de los maestros especialistas, orientadores y PTSC.
-      Compartimos el mismo contexto y entorno.
-      Estamos muy cerca unos de otros, a un paso.
-      Compartimos problemas y necesidades.
-      Y lo más importante, compartimos muchos sueños.

El programa Cuatro Tizas se articula en tres fases, tal como recoge el organigrama final:
-      Primera Fase: Se debería desarrollar durante el primer año de implementación. En esta fase cada uno de los centros ofrece una actividad anual, responsabilizándose de la planificación, organización y ejecución de la actividad. El resto de los centro, en la medida de sus posibilidades, participarán en esta actividad programada.
“Ejemplo: El CIP Federico Muelas organiza el Concurso de Poesía en la escuela. Elabora las bases, busca esponsors, jurado, premios, etc. Publica y divulga el concurso, y los centros de Cuatro Tizas, participan de forma diferente: Casablanca sólo lo hace con su alumnado de primaria y Fray Luis de León sólo en Infantil. También pueden participar otros centros docentes, aunque lo deseable sería encontrar una participación semejante o igual de los centros que participan en CT. Pero el compromiso de los centros CT es sólo participar de alguna forma.”

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